jueves, 27 de junio de 2013

DE ALGO A ALGUIEN


LA SUPERACION LLEGA CUANDO DEJAS DE SENTIRTE ALGO Y COMIENZAS A SENTIRTE PERSONA.


La mañana que descubrí que durante años había sido algo, envuelta en sueños y fantasías, buscando lo que todos buscamos con ardiente deseo, amor, pero llego el día cruel en el que supe ver que el amor que yo encontré estaba intoxicado, que más que apoyo y seguridad me había anulado de tal manera que entre criada y ramera es lo que me hacia sentir.




 

Benditos golpes que aquel día recibí, paliza soberana y cruel, que con dolor y desgarro la venda de la costumbre de convivir y pensar que tal mentira es amor, consiguió que me cayera. Una vez abrí los ojos una vez salí del hospital comprendí que había un mundo, un mundo que yo conocía de joven y que en los últimos años pasaba por mi lado siendo yo invisible.

Ese día comprendí que ya dejaba de ser algo, ese día, si ese. Me contemple desnuda ante el espejo de mi dormitorio, los hematomas en brazos y piernas, el pecho izquierdo desgarrado y desprendido y aquella voz que no podía borrar de mi mente –“ en la cara no te voy a dar, me lo aconsejo mi amigo ”, …… que ironía, durante veinte minutos contemple mi imagen, al mismo tiempo que observaba pasar los minutos en el reloj, no sabia si estaba llorando o riendo, las lagrimas no paraban de salir y no sabia bien que hacer, llevaba años con él y desde hacia cuatro, antes de tomar la niña la comunión había empezado esto, al principio empujones y algún pellizco, más tarde fue aumentando, difícil de comprender, yo lo quería y pensaba que él también, cada vez los golpes fueron con más frecuencia, insultos y descréditos aderezaban las palizas, la vida no tenía sentido, como mi marido, él que debía protegernos hacia eso, llegue a justificarlo, está deprimido, no sabe lo que quiere.

Recuerdo como un puñal la frase de mi hija, en su inocencia y sufrimiento, no puedo olvidar la noche en la que acariciándome la cara me dijo: “mama duérmete que estas cansada, si viene a pegarte te aviso”. Fue allí donde comprendí que debía de plantar cara y enfrentarme al que se había convertido en un peligro, en verdugo de emociones para nosotras pues ya le había levantado la mano incluso a la niña, 17 de agosto del 2005, bendigo esos golpes, bendigo aquella paliza pues de no ser por ella no se que hubiera pasado, yo ingrese en el hospital y a el se lo llevaron esposado.

Ante el espejo desnuda y llena de golpes comprendí que el fin de los días de ser algo ya habían pasado, que debía de continuar y de comenzar pues yo debía ser alguien no simplemente algo.

Nadie sabemos lo que se vive detrás de la puerta de una casa, solo lo saben los que en ella viven, hablar es fácil pasarlo no, respeta a las personas que sufren o sufrieron malos tratos y recuerda que muchas perdieron su vida en situaciones como la que yo viví, respeta y se prudente en tus comentarios pues no sabes que vueltas dará tu vida.

Mi imagen física fue reflejo y testigo de mis etapas emocionales.

Yo sufrí malos tratos continuados durante más de cuatro años.

domingo, 9 de junio de 2013

QUE MÁS DA! PARTE II


Si tengo claro, muy claro y es evidente que se lo que quiero y donde estoy, también soy consciente de lo que viví y de que  fue negativo o amargo, pero supe aprender. Pena da tener que reconocer que a “enemigos puente de plata”, reconozco y reconoceré que tener que agradecer a quien o a quienes te hicieron daño, que gracias a ellos aprendiste, no se aprende de halagos, no se aprende de regalos o sonrisas, se aprende de palos y de la crueldad que existe y de que la realidad supera a la ficción eso lo vamos a ver, pues esta historia que roza la locura y en más de un momento la cruel desesperación, amarga y dura experiencia que causando dolor aporto a mi conocimiento y seguridad, experiencia amarga, hiel envenenada que me ayudó a consolidar mi personalidad, a saber lo que quiero y el por que.

Si, sufrí maltrato en el ámbito familiar, físico y psíquico, pero tal vez aunque no esperas que quien fue tu enamorado te golpee o humille, lo que menos esperas es que miserias de personas, espíritus miserables, que aprovechando tan enriquecedora situación pulularon en mi entorno, como hienas y rapaces pensando que provecho obtendrían de un matrimonio desecho, sufrí acoso, chantaje y un rosario de situaciones tan surrealistas como retorcidas, producto de mentes enfermas, carentes de vida propia, gente con falta de ser gente, buitres pesados que con acciones inquisitorias dejaron ver el tipo de personas que eran y son, pero repito y con orgullo que gracias a este grupo de truhanes carentes de vida propia, aprendí quien era y quien soy.

 Todo el arrastre vivido me enseñó  a estar en mi sitio. Por tanto, es ahora mi deber poner a cada uno en el lugar que le corresponde, ya que es de buen samaritano enseñar al que no sabe y si yo aprendí, ahora que aprendan los que no comprendieron la lección.

Tendré que describir a los personajes de esta historia real vivida por mí, mi hija y personas de mi entorno más próximo, testigos del esperpento que la vida real nos hace sufrir, aunque, cierto es que “la grandeza de una persona se conoce por el número de enemigos que tiene”. Aunque, también es cierto, que depende la calidad de dichos enemigos y si pienso en algunos de ellos…. ¡Deprimente!

Yo no sé si soy grande como persona - alta sí soy, mido un metro setenta y siete-, pero algo estaba haciendo, algo estaba impulsando, algo había emprendido o puesto en marcha como persona, mujer o empresaria que atrajo a moscardas a esta confitura.

No fui consciente en mucho tiempo de que realmente lo que estaba impulsando cambiaría muchas cosas, ni imagine jamás, que el detonante por el cual todos los personajes ambiciosos y ansiosos de poder o protagonismo que entraron en escena, utilizarían mi situación personal, en la cual me vieron débil, apagada o vulnerable y como carroñeros haber lo que caía. Desconocedores que son: tu trabajo, tus ideas personales renovadoras o innovadoras las que  consolidan tu trayectoria, lo que te aporta la estabilidad y  el reconocimiento a tu empeño y continuidad, los que impulsan tus objetivos, no el ser unos trepas avasalladores que lo único que saben es imitar o plagiar el trabajo que tu haces.

Describir al que fue mi marido francamente no es mi apetencia, pero nunca hablé ni hablaré mal de él. Me ceñiré lo más estrictamente posible a los hechos y momentos vividos, los nombres de los personajes los variaré, no quiero hacer leña del árbol podrido, la madera enferma no hace buen mueble, no haré  publicidad al que no la merece. Intentaré solo narrar, describir sin insultos ni ofensas, pues no guardo rencor a ninguno de los que, al fin y al cabo, y contraria a su intención inicial de despedazarme, considero los artífices e impulsores de mi éxito personal, de que a DIA de hoy me siente libre de cargas, segura de mi misma y en plena disposición de saber decidir sobre mi y lo que es y va a ser mi vida.

Como en toda historia están los buenos y los malos, yo creo que ni eran tan malos ni quizás yo sea tan buena, pero lo que si he aprendido a diferenciar es la intención con la que se hacen las cosas, la ambición es muy mala consejera y más si en intima amiga de la envidia, es muy verdadero que hay que vivirlo y sentirlo para saber lo que se pasa y como cada persona lo sufrimos de una manera distinta, mi matrimonio no es ni el primero ni el último que se rompe y que se continuarán rompiendo, pero si que tu vas a valorar y a darte cuenta de que las circunstancias y argucias que se utilizaron para apartarme o quitarme de en medio fueron muy maquiavélicas y tramadas con argucia y exceso de mala fe, del comportamiento de mi exmarido si me quedo claro que fue un aprovechado y que su interés en mi lo baso en lo económico, como todos los hombres que son infieles, su actitud fue como supe tiempo después la de todos los hombres que son infieles y que de una u otra forma saben y son muy conscientes de lo que están haciendo, el por que de la extrema situación vivida, como es lógico, mientras no son conscientes de que sospechas, de que lo sabes y de que eres plenamente consciente de que te están engañando, ellos intentan o llegan a creer que lo consiguen el disimular, tapar el engaño, pero es imposible, de una forma o de otra nosotras lo intuimos e incluso sin llegar a saber que pasa exactamente pero sabemos que ese día llego.

Si a todo lo que empiezas a sospechar, a intuir le aderezamos con que falta dinero del lugar habitual en que tu lo guardas, cuando dices y le preguntas ¿Qué te pasa?, responden con evasivas y a la defensiva, las salidas con supuestos amigos aumentan y siempre esta el caritativo de turno que se presta para hacerle de tapadera, vamos ya clama, ¿por tan tontas nos tienen?, ¿tanto subestiman nuestra capacidad?

No creo que mi matrimonio fuera perfecto, ahora se que nunca lo fue, pero dicen que si el amor todo lo vuelve de color de rosa, en mi caso con los años el color rosa se convirtió en tan morado, gris y siniestro, que ya creo que lo ocurrido y el desenlace vivido era y fue lo que más de uno estaba esperando, quizás por que siempre se dieron cuenta de lo que yo jamás vi o no quise ver, a tal extremo me engañe a mi misma que me sentía plenamente feliz, cuando me preguntaban, ignorante de mi, pues las preguntas venían motivadas por lo que desde fuera los demás veían, yo ciega y absurda, desconectada de la realidad que vivía a diario respondía pletorita, “soy muy feliz”, me lo creía y todo, creo que por cuestión de cultura, si eso que desde pequeñas nos meten o nos metemos solas en la cabeza, un marido, un príncipe azul, una familia, un hogar, vamos que es lo que nos creemos que nos va a hacer felices, y una mierda, soy más feliz ahora, segura de mi misma y me siento plena como persona y mujer, gracias a que me despoje, me rasgue todos esos tópicos y me deshice de cuentos de hadas y pamplinas, fantasías irreales que nos alejan de ser quien somos realmente.

Yo soy Maria Eugenia, persona, madre y mujer, si mujer y como saben ser mujer no es fácil ni sencillo, la complejidad esta a cada paso que damos, nuestra barrera la mentalidad de la sociedad y sobre todo y ante todo y lo peor de todo, nuestra mentalidad, esos criterios de familia de cásate con un buen hombre, el matrimonio es necesario, sin un hombre no eres nada, ¿Y por que necesito a un hombre yo para ser algo en la vida?, si yo ya soy yo, valgo por mi por mis hechos y decisiones.

Claro está que sabiendo lo que hoy sé y teniendo la decisión y seguridad que tengo en mi, pues confío en mi, cuestión muy importante y de vital importancia para que nos demos cuenta de que ser uno mismo es ante todo haber aprendido a ser feliz.

Tengo el firme convencimiento de que en mi evolución hacia la madurez y claridad de conceptos e ideas que a día de hoy tengo, era muy necesario y lo afirmo, fue muy necesario el proceso que me hizo crecer y evolucionar como persona ante todo, en ese proceso fue necesario mi exmarido.

Desde que salí de casa de mis padres mis ilusiones e ideas de joven que me quería comer el mundo fueron quizás la fuerza que me impulso a esa marcha, adoraba a mi madre y hermana, pero mi vida tenía que ser como yo quería, no como quisieran los demás, ser ama de casa criar hijos, poner el Belén en navidad y hacer repostería, si me gustaba, enamorarme y tener un hogar, eso que dicen que es la estabilidad y la felicidad, pero antes de llegar a eso tenía que conocer, saber y darme cuenta de que era la vida en realidad, como joven rebelde y con aspiraciones, inquieta y con pasión que hervía  en mis venas, las relaciones con mi padre al que quiero muchísimo no eran lo buenas que hubiera deseado, pero mis ansias de conocer mundo y mi espíritu de aventura creo que fueron ingredientes decisivos en mi partida.

Como solo nos vamos a centrar, de momento en una cuestión, como mi intención no es divagar y dispersar el tema, nos centraremos en mi relación sentimental más larga, esa que dicen es la que es para siempre, un día me pregunto una amiga, ¿Qué hiciste para divorciarte?, me case le respondí.

Esta claro que tiene que haber un comienzo para que haya un final y que no imaginamos nunca ni sabemos cuando nos llegará ese principio que necesitamos para encontrarnos realmente a nosotros mismos, pero cuando pasa, cuando ya pasó y sientes en tu interior que tras tremendo vendaval aún estas ahí, notas que tus ideas están más claras que nunca y que tomas decisiones con rapidez seguridad y mucha claridad de objetivos, es ahí cuando sabes que ya eres libre, que por fin tu ya eres tu, que tu vida ya es realmente tuya y que la vives como tu quieres vivirla y sentirla, ya nadie te ata, ya nadie ni nada, sea pensamiento, ideología o simplemente costumbres adquiridas, pues en resumen somos eso, ideas inculcadas y costumbres, somos demasiado costumbristas.

Ahora comprendo que viví el proceso y que quizás sea una persona afortunada pues habrá personas que en toda su vida no hayan encontrado su verdadero yo, su verdadero lugar.

La suma de acontecimientos y hechos emocionales fueron el resultado de que yo me hiciera fuerte y que mi capacidad creciera, obteniendo algo importante y necesario, creer en mi misma, saber que yo pienso por mi y que mis ideas e iniciativas son mías, pues yo tengo mis decisiones y valores propios, que la influencia de gente toxica de mi entorno no es necesaria, pues yo ya se decidir por mi.

 

Cuando te enamoras, no sabes lo que te atrae de esa persona, la conjunción de físico, emoción o de la situación personal en ese momento, lo cierto es que el, llego a mi vida como empleado, reconozco que siempre he sido muy independiente pero en aquellos momentos y no se por que me convertí en dependiente, no se ni puedo explicar lo que ni yo misma entiendo pero lo cierto es que entre el chico contratado para se el portero de mi negocio y yo surgió una amistad, agradable, compañerismo y desde luego reconozco que me hacia reír, tal vez encontramos el no en el otro apoyo o comprensión, yo me sentía sola y tal vez el también, no fue eso de aquí te pillo aquí te mato, estuvimos meses de salir, ir al cine, paseos conversaciones en la puerta del local.

Carrusel era como todo lo que yo hago, una mezcla de Pub, discoteca, music-hall, espectáculo, un coctel nocturno divertido pero a su vez peligroso.

Los días pasaban y sin tener claro lo que había realmente entre nosotros lo cierto es que un día me di cuenta de que me había enamorado, no me da vergüenza reconocerlo, yo quererlo lo quise mucho, no le odio ni guardo rencor, no quiero verlo mas, ni en pintura como diría mi abuela, pero rencor ninguno, el que odia nunca es libre, es siempre prisionero de su odio y ese sentimiento no permite crecer como persona ni proyectar tus sentimientos con libertad.

Fueron años pues como los de muchas pareja, había ilusiones o eso creí yo, proyectos pocos pues yo no paro soy un torbellino de iniciativas y el mas cómodo, mas pasivo laboralmente, como lo describe una intima amiga mía, ahora pues si me doy cuenta que su comodidad y pasividad hacia que toda la economía dependiera de mi trabajo, pero creo que ni lo pensaba, ni me lo plantee nunca, me sentía a gusto e incluso diré que feliz, pues aunque ni yo soy perfecta ni el tampoco lo fue, lo que si me transmitía, boba de mi, que sola me lo trague, creí sinceramente que era leal y que sus palabras realmente eran sinceras, quizás su comportamiento